El 70% de los cáncer de pulmón se detectan en etapa avanzada: cuáles son los síntomas y cuándo consultar
El cáncer de pulmón es una de las principales causas de muerte en todo el mundo y es la primera causa de muerte por cáncer.
En los últimos 20 años, se duplicó la cantidad de personas diagnosticadas y en la actualidad, 1 de cada 5 personas en el mundo, desarrollará algún tipo de cáncer a lo largo de su vida.
De manera equivocada, se suele creer que el cáncer de pulmón afecta particularmente a los hombres, pero esto no es así.
Desde el 2010, el cáncer de pulmón aumenta de manera sostenida en mujeres, principalmente por el aumento del tabaquismo y es la segunda causa de muerte por cáncer en las mujeres, después del cáncer de seno.
El diagnostico no siempre es fácil, porque los síntomas empiezan a manifestarse cuando la enfermedad ya está bastante avanzada.
Esto disminuye las posibilidades de tratamiento y cura, y es por eso que es importante el control periódico y estar atentos a los síntomas.
¿Los pulmones duelen?
Los pulmones son órganos que tiene pocas terminales nerviosas, de modo que un tumor puede desarrollarse en un pulmón, alcanzar unos 5 o 6 centímetros y no doler en absoluto durante mucho tiempo.
Es por eso que suele descubrirse por casualidad cuando investigamos otras enfermedades o cuando ya hicieron metástasis en otros órganos.
Una metástasis de hueso puede provocar dolores o una de cerebro, puede provocar dolores de cabeza o pérdidas de memoria y al estudiar estos síntomas, muchas veces se descubre el cáncer de pulmón.
¿Cuáles son los síntomas?
Como decíamos anteriormente, los tumores pueden ser muy pequeños y no presentar ningún tipo de síntomas, pero a medida que crecer, los síntomas sí comienzan a aparecer.
Si bien estos síntomas también corresponden a otras patologías que no tienen que ver con el cáncer, de todas maneras, siempre es conveniente consultar con un médico
- Tos nocturna.
Una tos persistente y que se intensifica, no necesariamente está ligada al cáncer de pulmón, pero enciende las alarmas. En especial, si es muy fuerte por las noches o la mañana, cuando las personas están acostadas.
Si la tos se acompaña con dolores en el pecho, respiración corta y sibilante, expectoración sanguinolenta, malestar general (nauseas, fatiga, pérdida de apetito).
Es común que los fumadores crean que la tos por la mañana o la noche es normal, pero ante estos casos, es mejor consultar con un especialista.
- Dolor en el pecho.
Cuando el tumor es voluminoso y alcanza la pleura, puede provocar dolores en el pecho que se intensifican cuando sobrevienen los ataques de tos o cuando se respira profundamente.
- Dificultad para respirar.
Sin no existen problemas cardiacos, una respiración corta, una sensación de ahogo inhabitual o la respiración sibilante, pueden tener origen en un cáncer de pulmón.
Si estos síntomas respiratorios persisten y usted es fumador o fue fumador, aun cuando haya dejado de fumar hace muchos años, consulte con el médico.
- Dificultad para tragar.
De manera poco frecuente, el cáncer de pulmón puede generar dificultades para tragar. En este caso, se debe a que el tumor comprime el esófago.
- Dolores de espalda.
La mayoría de los cánceres pueden propagarse a los huesos. Este es el caso del cáncer de pulmón, cuando hace metástasis en los huesos, porque puede atacar la columna vertebral, las costillas, los brazos y las piernas.
Una vez que llegan a los huesos, las células cancerígenas los “carcomen” y provocan dolores y fracturas.
Diferencias entre hombres y mujeres.
Las diferencias en los síntomas no existen. Son iguales tanto para hombres como para mujeres, pero sí la edad puede ser un factor a tener en cuenta.
La edad promedio se ubica entre los 60 y 65 años para las mujeres y los 67 en los hombres.
Otra diferencia tiene relación con el tipo de cáncer. En las mujeres es más frecuente un tipo de cáncer originado en una alteración genética y no ligada al tabaco.
Aun se ignora por qué ataca más a las mujeres, pero sí comparte los mismos síntomas que el cáncer generado por el tabaco que afecta a los hombres.
Recuerda que la prevención es la mejor arma con la cual contamos. Nunca dejes de consultar con tu médico.