10 hábitos que deberías abandonar si quieres proteger tus riñones.
Algunas personas han adoptado un estilo de vida con el que se sienten cómodos y están tan acostumbrados a determinados hábitos que no se han detenido pensar el daño que esto está provocando en su salud. Muchos tenemos algunas costumbres demasiado arraigadas como para percibir qué tan nocivas están resultando.
Te señalaremos algunos de sus hábitos que tal vez formen parte de tu rutina y que puntualmente están dañando tus riñones, además de otros órganos de tu cuerpo.
Presta atención a estas distintas formas de dañar tus riñones que debes dejar de hacer cuanto antes y cambiar por otro hábito más saludable que redunde en un beneficio general para tu organismo.
Tabaco y alcohol, mala combinación:
Ya hace muchos años que sabemos que el tabaco no aporta ningún beneficio sino más bien todo lo contrario. Son muchas las consecuencias que acarrea el cigarrillo generando enfermedades además de afectar la piel y manchar los dientes; entre otras.
Si a eso le sumamos el consumo excesivo de alcohol, tenemos un cóctel letal para la salud de nuestros riñones. Estos se encargan de filtrar las sustancias tóxicas que ingresan a nuestro organismo, pero cuando son demasiadas, estos órganos se saturan y no pueden procesar tanto elemento nocivo; en consecuencia, los riñones se dañan.
Exceso de cafeína:
El café o las bebidas que contienen cafeína, pueden tener un impacto positivo en nuestro organismo, pero como todas las cosas cuando nos excedemos nuestros órganos se resienten. Este es el caso de los riñones que deben trabajar en exceso para filtrar grandes cantidades de cafeína que además de inhibir el sueño y no dejarte descansar correctamente por las noches, también tiene importantes propiedades diuréticas que deshidratan tu cuerpo.
Poco descanso:
El tejido de los riñones se revitaliza precisamente por las noches en el momento en que el cuerpo está en reposo y descansando. Si no dormimos lo suficiente esta regeneración no se realiza de manera correcta y propicia un mal funcionamiento renal.
Falta de vitamina B6:
La vitamina B6 la encontramos principalmente en aves, pescados y frutas (exceptuando los cítricos) esta vitamina es fundamental para el buen funcionamiento del riñón y se aconseja variar el consumo de estos alimentos a diario.
Vida sedentaria:
Tanto la vida sedentaria en general como tener una actividad laboral que no te permita moverte durante horas, estanca el correcto funcionamiento del riñón.
Para mantener la circulación sanguínea fluida es necesario que una vez por hora realices algún movimiento cómo desplazarte de un sitio a otro, caminar durante cinco minutos o hacer algún tipo de ejercicio leve.
Vaciado de vejiga irregular:
Retener la orina en la vejiga durante mucho tiempo es uno de los peores hábitos que podemos adoptar y es algo que principalmente hacemos las mujeres. Esta mala costumbre puede generar con el tiempo incontinencia e insuficiencia renal. En cuanto tengas la necesidad de orinar no dejes pasar mucho tiempo reteniendo líquidos.
Exceso de sodio:
La principal forma de consumir sodio es a través de la sal que incorporamos a los alimentos y que como ya sabemos, genera complicaciones en el organismo.
¿Qué dirías si te dijéramos que la dosis de sal que se recomienda para un adulto es de 5g? Seguramente te parecería muy poco y es probable que en este momento estés calculando que a diario consumes mucho más que eso. Esto no es bueno para la salud en general y mucho menos para los riñones. ¡Reduce cuanto antes el consumo de sal!
Dietas descontroladas:
Es habitual encontrar en revistas, dietas que prometen un descenso de peso rápido y seguro y es probable que así sea, pero lo que también es probable, es que estas dietas no estén aportando los nutrientes necesarios y esta falta de nutrientes resienta la salud de los riñones.
Exceso de proteínas:
Las proteínas son necesarias al igual que las vitaminas y la fibra, pero cuando consumimos en exceso, suelen depositarse en los riñones y con el tiempo generar cálculos (piedras). Esta descomposición de las proteínas que debe realizar el riñón satura los órganos y recarga su trabajo.
Escasa ingesta de agua:
Más del 60% del cuerpo humano se compone de agua. Incluso se componen de agua nuestros propios huesos, de modo que es importante tomar conciencia de la importancia que tiene consumir agua porque esto redunda en un beneficio y tiene un impacto directo sobre los riñones.
El agua sirve para eliminar impurezas, estar hidratado, bajar de peso, brindar saciedad, mejorar la función cerebral y mejorar nuestra piel entre otras muchas cosas.
Nuestra salud, casi siempre está en nuestras manos. Estar informado sobre lo que nos beneficia como así también sobre lo que nos perjudica es nuestra responsabilidad. Prestemos atención a estos indicadores y piensa si estás cayendo en exceso en alguno de ellos; esto podría estar perjudicando seriamente tu riñones.